Entre el reducido porcentaje de participación, que apenas alcanza el 18 por ciento, las directoras de cine y las fotógrafas son las más escasas.
Nueva York, 10 de enero (AP).- Las mujeres representaron tan solo el 18 por ciento de todos los directores, guionistas, productores, productores ejecutivos, editores y fotógrafos que trabajaron en las principales 250 películas estadounidenses estrenadas el año pasado, según un nuevo estudio.
Los resultados del vigésimo estudio anual “Celluloid Ceiling”, sobre el empleo de mujeres detrás de las cámaras, fueron difundidos el lunes por el Centro para el Estudio de las Mujeres en la Televisión y el Cine de la Universidad Estatal de San Diego. Los hallazgos muestran que prácticamente no ha habido cambios en Hollywood en los últimos 20 años. En 1998, el porcentaje de mujeres detrás de las cámaras fue de 17 por ciento.
El estudio halló que en las 250 principales películas del año pasado, hubo un 25 por ciento de productoras, un 11 por ciento de directoras y apenas un 4 por ciento de directoras de cinematografía o fotógrafas.
“La industria del cine no ha logrado en absoluto manejar el continuo infraempleo de mujeres tras bambalinas”, dijo Martha M. Lauzen, la autora del estudio. “Esta negligencia ha producido una cultura tóxica que apoyó los recientes escándalos de acoso sexual y que trunca tantas carreras de mujeres”.
La semana pasada, un estudio publicado por la Universidad del Sur de California, campus Annenberg, encontró que entre las 100 películas más taquilleras, el porcentaje de directoras subió de 4.2 por ciento en 2016 a 7.3 por ciento en 2017. Pero ese número sigue siendo menor que el 8 por ciento registrado en el 2008.
Al igual que en el pasado, los estudios proporcionan evidencia estadística para la alarma generalizada sobre la igualdad de género en Hollywood. Más de 300 mujeres en la industria del entretenimiento formaron recientemente la iniciativa “Time’s Up” para impulsar la representación igualitaria de mujeres en cargos ejecutivos y para ayudar a víctimas de acoso sexual a defenderse.